La producción de cebolla arequipeña ha disminuido en la región, pues de ser cultivadas 100 mil hectáreas ahora los agricultores solo siembran en 50 mil, así lo denunció el vicepresidente de la Sociedad Agrícola de Arequipa (SADA), Luis Guillén Lazo. Ello a pesar que la región ocupa el primer lugar a nivel nacional (con 76 %) en comercializar el producto.
El problema -según describe Guillén- es que los hombres del agro fueron abandonados por los gobiernos, pues desde Pedro Castillo no se da solución a la compra del fertilizante, hay falta de agua y las semillas son escasas. Se suma a ello, las protestas que impiden la distribución de los productos agrarios.
“No tenemos dinero para producir como antes. Nuestro sector está terriblemente golpeado. Hasta un saco de úrea está caro, de lo que costaba 100 soles ahora subió a 400”, sostuvo.
Asimismo, remarcó que por sus características, la cebolla roja arequipeña es la más solicitada en el mercado mayorista de Lima Metropolitana. También en el exterior, en países como: Bolivia, Ecuador, Colombia y Venezuela.
Por lo mismo, este producto es una buena fuente de ingresos que no estaría siendo aprovechado por el Estado. Guillén responsabilizó a las autoridades del Gobierno central de descuidar el sector por años.
Los representantes rechazaron el fertiabono que entrega el Estado, pues no lo considera suficiente para reactivar sus economías. En su lugar, proponen que la compra del fertilizante sea de gobierno a gobierno y no directamente con una empresa. Además, pidieron a la ministra de Desarrollo Agrario, Nelly Paredes, reunirse de inmediato con los gremios del agro para generar mejoras.
BUENAS NOTICIAS. A pesar que hay menos hectáreas de cultivos de cebolla arequipeña, la lucha del sector agrícola por tener más mercados dio frutos, por tanto ahora se llevará la cebolla hacia Lima todos los días, antes se llevaba dos veces por semana. Asimismo, solo aceptarán distribuir esta especie en sacos de 50 kilos y ya no en costales de 100.