En medio de las celebraciones del Corso de la Amistad del 15 de agosto, una escena llamó la atención y desató comentarios positivos entre los asistentes. Durante el desfile, varios varones de la Asociación de Hombres por la Igualdad llegaron cargando mochilas portabebés en su pecho y otros empujando carriolas, enviando un poderoso mensaje sobre la igualdad de género y el rol de los hombres en las tareas del hogar.
La presencia de estos padres en el corso no solo fue un acto de ternura, sino también una declaración: los varones también deben involucrarse activamente en el cuidado de sus hijos y en las labores del hogar y no como apoyo, un favor ni obligación, sino como una actividad regular.
Con este gesto, demostraron que las tareas domésticas y el cuidado infantil no son responsabilidad exclusiva de las mujeres, sino que son un compromiso compartido.
“Es importante que todos contribuyamos en casa. No es solo una cuestión de ayudar, sino de asumir la responsabilidad que nos corresponde como padres y parejas”, comentó uno de los varones que participaba del corso mientras cargaba a su hija de un año en su pecho.
Este acto de igualdad y apoyo en el hogar fue recibido con aplausos y palabras de aliento por parte del público, quienes vieron en estos padres un ejemplo a seguir.
La imagen de los hombres participando activamente en el cuidado de sus hijos durante una celebración tan significativa para la ciudad subraya un cambio positivo en la sociedad arequipeña, donde cada vez más personas abogan por una verdadera equidad en las responsabilidades familiares.
Un gesto que no es machista ni feminista, solamente es mostrar a adultos funcionales que hacen actividades regulares para subsistir.
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