Tras 11 días de haber competido en los Juegos Olímpicos París 2024, la gimnasta rumana Ana Barbosu lució la presea de bronce que perdió ante la estadounidense Jordan Chiles. Esta decisión fue tomada tras la intervención del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), luego de la controversia que se generó en la prueba de suelo de gimnasia artística en la cita deportiva mundialista.
Esta polémica en los Juegos Olímpicos París 2024 se dio cuando la medalla de bronce fue otorgada a la norteamericana Jordan Chiles, después de que el entrenador del equipo de Estados Unidos, realizará una apelación durante la final del ejercicio de suelo el 5 de agosto pasado, donde se daba por ganadora, inicialmente, a Barbosu.
Sin embargo, el tribunal deportivo determinó que la apelación estadounidense se presentó cuatro segundos después del límite de un minuto, por lo que decidió anular su decisión y reasignar la presea de bronce el último viernes, 16 de agosto, a la atleta Ana Barbosu, de 18 años, en una ceremonia que se llevó a cabo en la capital de Rumania, Bucarest.
“No esperaba que la medalla fuera tan pesada, pero la usaría día y noche si es lo que se necesita para tenerla”, expresó Barbosu al término del evento.
Cabe recalcar que en esta disciplina brillaron la brasileña Rebeca Andrade, quien ganó la medalla de oro, y la estadounidense Simone Biles quien subió al podio tras lograr la presea de plata.
Con esta medalla, Barbosu logró la primera medalla olímpica femenina en gimnasia para Rumania desde los Juegos Olímpicos de Londres 2012, reavivando la esperanza de que el país vuelva a brillar en la disciplina.