Las economías de América Latina y el Caribe enfrentan un panorama complejo para el 2025, ya que se estima que crecerán solo 2.5 % este año, según el último informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El informe destaca que el crecimiento económico de la región sigue dependiendo en gran medida del consumo privado, mientras que la inversión permanece rezagada.
Durante la última década (2015-2024), el crecimiento promedio anual fue de apenas 1 %, lo que ha resultado en un estancamiento del PIB per cápita.
El secretario ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs, subrayó la necesidad de aumentar la capacidad de las economías para movilizar recursos financieros y fortalecer la resiliencia frente a las fluctuaciones económicas.
Durante la presentación del informe, realizada junto con Daniel Titelman, director de la División de Desarrollo Económico de la CEPAL, se enfatizó la importancia de adoptar políticas de desarrollo productivo que incrementen la productividad, fomenten la inversión en capital productivo y generen empleo de calidad.
En 2025, se espera que América del Sur crezca un 2.6 %, Centroamérica un 2.9 %, y el Caribe (sin incluir a Guyana) un 2.6 %. Sin embargo, persisten desafíos significativos, como el bajo ritmo de creación de empleo, la elevada informalidad y las brechas de género en los mercados laborales.