El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) estima que el Perú termine con una inflación del 2 % al cierre del 2025, así lo confirmó durante la mesa redonda: “Inflación: pasado, presente y futuro”.
“La estabilidad de la inflación en el Perú es un indicador clave para la recuperación económica. En nuestra economía, el impacto de la inflación en los hogares se ve reflejado en el alza de productos básicos como el trigo y el maíz. Según datos del BCRP, un aumento del 10 % en estos insumos podría elevar hasta en 0.5 puntos porcentuales el índice de precios al consumidor (IPC)”, explicó la subdirectora académica de la Facultad de Negocios de Zegel, Milagros Torres.
En 2024, tanto Canadá como Perú registraron una de las inflaciones más bajas de la región, cerrando el año en torno al 2 %. A nivel global, se espera que la inflación continúe disminuyendo en grandes economías, salvo en el caso de Brasil y Estados Unidos.
Según el análisis de Eiffel-Frankel en 2009, que explicaba el aumento de los precios de las materias primas debido a la expansión de la política monetaria en EE. UU. Este fenómeno ha sido históricamente determinante en la inflación de países con economías dependientes de commodities, como el Perú.
“Los ministros de economía y presidentes de bancos centrales deben comunicar de manera efectiva las estrategias para mitigar el impacto de la inflación. Un mal manejo del discurso puede generar incertidumbre en los mercados, como ocurrió en Chile cuando un ministro minimizó el impacto inflacionario destacando la reducción en el precio de las flores”, agregó Torres.
Por último, manifestó que si bien la inflación en Perú parece estar bajo control, la volatilidad de los mercados internacionales y las decisiones de las principales potencias económicas seguirán siendo determinantes en el comportamiento de los precios durante el 2025