“El mensaje a la nación por Fiestas Patrias debe marcar un punto de quiebre para el país. La presidenta Dina Boluarte tiene la oportunidad y la responsabilidad de abordar con urgencia dos temas que frenan nuestro desarrollo: la inseguridad ciudadana y la parálisis económica causada por el exceso de permisos y trabas administrativas”, señaló el presidente de ComexPerú, Alonso Rey Bustamante.
También advertió que la inseguridad es una amenaza real para la inversión, el empleo y la vida de los peruanos. “El Perú necesita un plan integral que ataque la raíz del problema: el avance del crimen organizado, la debilidad de la inteligencia policial y la falta de coordinación entre entidades del Estado. No basta con más policías ni con declarar estados de emergencias”, afirmó.
Sobre la situación económica, Rey sostuvo que es urgente aplicar un shock desregulatorio, transversal a todos los sectores, que permita reducir la tramitología que hoy “ahoga la inversión” y deteriora el empleo formal, el crecimiento del PBI y el desarrollo social. “Ese shock debe incluir una agenda seria de simplificación, eliminar permisos innecesarios, digitalización de trámites y reducción efectiva de la informalidad”, agregó.
En ese marco, consideró que, en su último año de gobierno, la mandataria debe priorizar la simplificación de contratación de personal, con miras a generar trabajo inmediato. “Es la reforma más urgente. Hoy, contratar trabajadores es complejo, costoso y riesgoso”, advirtió.
Afirmó, además, que el actual régimen laboral debe reemplazarse por uno más flexible, que responda a la realidad del país, permita reducir la informalidad empresarial y promueva la contratación sin temor a sanciones por errores administrativos.
“Se debe optar por un régimen alternativo y de manera urgente. Cada año sin cambios representa oportunidades perdidas para miles de jóvenes y condena a cientos de empresas a la informalidad. Si el Gobierno quiere dejar un legado, esta debería ser su prioridad. Es el primer paso para reactivar la economía con empleo digno, formal y sostenible”, concluyó.