El último jueves el Congreso de la República aprobó un proyecto de ley relativo a la modificación de la Ley Forestal y de Fauna Silvestre, a pocos días de culminada la COP 28 y pese a los esfuerzos del Estado por proteger a la Amazonía,
Dicha norma, contiene medidas que permitirían el aumento de la deforestación pese a que nos encontramos en una lucha permanente contra el cambio climático. A pesar de los impactos negativos de esta norma, actores del sector privado venían promoviendo la aprobación de la misma.
El pasado 7 de julio de 2022, el Congreso aprobó un texto sustitutorio de los proyectos de ley 649/2021-CR y 894/2021-CR, que modificaría la Ley N° 29763 (Ley Forestal y de Fauna Silvestre) poniendo en riesgo a los bosques al excluir al Ministerio del Ambiente (MINAM) de los procesos de zonificación, así como distorsionar y eliminar los procedimientos que buscan regular y reducir la destrucción de bosques en tierras del Estado y en predios privados.
Esfuerzos en peligro
Para DAR, estas medidas promueven la deforestación en la Amazonía y debilitan los compromisos asumidos por Perú frente a la lucha contra el cambio climático, tratados internacionales sobre temas ambientales, de comercio y de derechos humanos.
Entre estos compromisos internacionales y acuerdos suscritos por Perú están la Declaración Conjunta de Intención sobre REDD+ suscrita entre los gobiernos de Perú, Noruega y Alemania (DCI) y el Convenio sobre la Diversidad Biológica.
Además, la Estrategia de Crecimiento Verde en el marco de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el Tratado de libre comercio (TLC) de Perú con la Unión Europea (UE) y el Tratado de Libre Comercio de Perú con Estados Unidos, que contiene el Anexo Forestal.
Cifras de deforestación
Una de las principales causas de la deforestación es la expansión de la agricultura, que alcanza un 51.6 % a nivel naciona, según la Estrategia Nacional sobre Bosques y Cambio Climático del MINAM.
En tanto, el 48.4 % proviene de otras causas como la ganadería a pequeña y mediana escala vinculada al cambio de uso de tierra; actividades extractivas ilegales e informales como la minería y tala ilegal; el cultivo de coca y la expansión de infraestructura con proyectos de hidroeléctricas, hidrocarburos y carreteras.
Con la pandemia este proceso incrementó. Global Forest Watch identificó que:
- En el 2019 se deforestaron 231 257 hectáreas de bosques
- En el 2020 se perdieron 278 656 héctareas
- En el 2021 se deforestaron 225 203 hectáreas de bosques en el Perú.
Fuente: Andina