Paucarpata. La mayoría de pueblos jóvenes han labrado solos su futuro, crecieron a base de esfuerzo y sacrificio.
En la parte alta del distrito de Paucarpata podemos encontrar un claro ejemplo de este trabajo social. Se trata de la asociación de vivienda Virgen de Chapi, lugar que alberga a 1600 familias divididos en cinco zonas, en el lugar viven hace 21 años.
Ellos son vecinos de la asociación El Cebollar, una zona muy conocida porque durante décadas ha tenido que convivir con toda la contaminación generada por el botadero clandestino que crearon los municipios vecinos.
En Virgen de Chapi no tienen servicios básicos, ellos todavía deben usar los silos que habilitaron en los patios de sus viviendas, carecen del servicio de agua potable y desagüe ya que solo tienen piletas públicas y en el caso del servicio de energía eléctrica a pocos metros de su local social todavía tienen el poste que fue colocado hace un año en una ceremonia por el Día del Urbanizador, la promesa fue que se iba iniciar la instalación del servicio de luz, pero pasaron 12 meses y no se hizo nada.
El presidente de la asociación, Elias Sullca Divera, dijo que recién este año podrán tener la luz definitiva, un sueño anhelado por todos los vecinos, pero solo será para la primera etapa donde viven 350 socios, los demás todavía tendrán que esperar.
TRISTE REALIDAD. El dirigente lamentó que las autoridades solo visiten a los pueblos jóvenes cuando están en campaña política y luego que asumen el cargo se olvidan de sus promesas, por ello en esta asociación todas las mejoras que se hacen son fruto del esfuerzo de los socios quienes a través de faenas mejoran sus calles, arreglan su local social y ven sus necesidades.
“A veces da cólera que cuando nosotros solicitamos algún apoyo del gobierno central o alcalde de Paucarpata, no somos escuchados y entonces solo nos queda a nosotros mismos hacer las cosas. Por ejemplo, ahora después de las lluvias las calles quedaron totalmente dañadas y no había comunicación, no podían entrar los carros, entonces se ha coordinado con los presidentes de las otras asociaciones y ahora ya están habilitadas las calles”, comentó.
Recordó que en didiembre del año pasado hubo una asamblea en la parte alta de Paucarpata donde asistieron varias autoridades y fue ahí donde el gobernador regional, Rohel Sánchez se comprometió que en julio se debe realizar la licitación para la construcción de la planta de tratamiento de agua potable para que el proyecto se inicie en octubre.
“No tenemos agua y tenemos que llenar en un tanque y de ahí los socios pueden usar en las esquinas donde se tienen piletas. Tampoco tenemos desagüe y seguimos usando los silos en los patios de las casas.La luz eléctrica es provisional, pero no tiene buena potencia porque viene de Santa Rosa y por las noches no alumbra en las casas, de día como quiera como no usa mucho la gente se tienen mejor servicio, el problema es en la noche”, explicó.
SIN FORMALIZACIÓN. Al igual que otros pueblos, en Virgen de Chapi esperan la aprobación del Plan de Desarrollo Metropolitano (PDM) para que puedan formalizarse.
Esta asociación ha sido considerada de alto riesgo y en la anterior gestión del municipio provincial les indicaron que habían mejorado esa condición en 20 %, sin embargo con el cambio de gobierno no tienen las cosas claras y necesitan que los funcionarios les informen sobre su situación a fin que puedan efectuar acciones de mitigación y de esa manera puedan tramitar sus títulos de propiedad.