Escrito por. Annel Aguilar Zambrano
Un tribunal federal de Estados Unidos ha asestado un duro golpe a la política comercial del expresidente Donald Trump al declarar inconstitucional la mayoría de los aranceles globales y de represalia impuestos durante su mandato. La decisión, tomada por la Corte de Comercio Internacional, afecta gravámenes del 10 % a nivel global y tarifas de hasta 30 % sobre productos procedentes de China, México y Canadá.
El fallo establece que Trump excedió su autoridad presidencial al aplicar estas medidas bajo la Ley de Poderes Económicos en Emergencias Internacionales de 1977 (IEEPA). “Las órdenes de aranceles mundiales y de represalia exceden cualquier autoridad otorgada al presidente por la IEEPA”, concluyó el tribunal compuesto por jueces designados por Ronald Reagan, Barack Obama y el propio Trump. La sentencia incluye la suspensión inmediata y permanente de estas tarifas, aunque deja fuera otras aplicadas bajo la Ley de Expansión Comercial, como las del acero, aluminio y automóviles.
La Casa Blanca, a través de su portavoz Kush Desai, anunció que apelará la decisión. “Los déficits comerciales han creado una emergencia nacional que ha diezmado comunidades estadounidenses. No les corresponde a jueces no electos decidir cómo abordarla”, expresó. El caso podría escalar hasta el Tribunal Supremo, mientras empresas y consumidores enfrentan un clima de incertidumbre.
La noticia tuvo un impacto inmediato en los mercados internacionales. En China, los índices de Shanghái y Shenzhen subieron 0.7 % y 1.24 %, respectivamente, mientras que Hong Kong ganó 1.35 %. En Japón, el Nikkei de Tokio avanzó un 1.88 %, impulsado también por los buenos resultados financieros de empresas como Tokyo Electron (4.25 %) y Toyota (3.91 %). En Wall Street, los principales indicadores también reaccionaron positivamente, subiendo más del 1 % tras el cierre de la jornada.
Este revés judicial se produce mientras Trump busca un segundo mandato con una agenda que insiste en el proteccionismo comercial. China celebró la decisión y advirtió que las guerras arancelarias “no tienen ganadores”. El fallo deja un plazo de 10 días para aplicar las medidas cautelares, y si se ratifica en instancias superiores, podría significar el desmantelamiento total de la política arancelaria que definió la presidencia del exmandatario republicano.