La tecnología china vuelve a poner en jaque a Estados Unidos, esta vez se trata de una start up de inteligencia artificial (IA), DeepSeek (búsqueda profunda, en español), desconocida para el gran público hasta hace solo unos días, ha puesto este lunes 27 de enero en crisis las bolsas de Estados Unidos.
Su potente irrupción, que la convierte en la aplicación gratuita más descargada por los iPhone en EE. UU., China y otros países, por delante de ChatGPT, ha sido todo un terremoto bursátil.
La empresa desarrolla como su modelo chips menos potentes y menos inversiones, lo que pone en entredicho el modelo de negocio de Nvidia y cuestiona las enormes sumas que están desembolsando las tecnológicas en comprar sus semiconductores. Además, pone en duda la tesis de que las enormes barreras de entrada, a priori necesarias para competir, protegen el liderazgo de Nvidia.
La hasta hoy empresa más valiosa del mundo por valor en bolsa, con casi 3.5 billones de dólares, ve sus acciones caer al cierre de la sesión un 16.8 6%, o lo que es lo mismo, 589 000 millones de dólares evaporados en una sola jornada. Es la mayor pérdida de valor por parte de una acción en la historia de la bolsa, y el castigo la ha relegado al tercer puesto en el ranking mundial, por detrás de Apple y Microsoft.
De magnitud similar es el desplome de su rival Broadcom, y también supera el doble dígito el de Super Micro.
También ASML, fabricante de máquinas de fotolitografía para la industria de semiconductores, y hasta hoy tercera compañía por capitalización de Europa, se desploma en 7 %, y la alemana Siemens Energy, el 20 % abajo, aparece entre las más penalizadas, al suscitar dudas su papel clave como proveedor eléctrico de las infraestructuras de IA.
En otros puntos de Asia la escena se repetía: las firmas de chips japonesas, entre las cuales hay proveedores de Nvidia, cayeron con fuerza desde la madrugada del lunes 27 de enero.