Volvieron los incendios forestales en Los Ángeles. Esta vez alertaron a más de 50 mil personas de Eaton, que destruyó hasta la fecha más de nueve mil estructuras y quemó más de cinco mil hectáreas.
Actualmente, el incendio de Hughes es casi tan extenso como el de Eaton, aunque las consecuencias son significativamente diferentes en términos de impacto material.
Además, las lluvias pronosticadas en el sur de California podrían generar deslizamientos de tierra y escorrentías peligrosas en áreas quemadas por incendios recientes, advirtieron las autoridades locales.
Según CBS News Los Ángeles, los meteorólogos prevén precipitaciones en partes del condado de Los Ángeles, lo que podría provocar corrientes de lodo y arrastre de escombros hacia océanos, playas y otros cuerpos de agua.
Equipos de emergencia trabajan en la remoción de desechos en las zonas afectadas por los incendios Eaton y Palisades antes de la llegada de la lluvia, con el fin de mitigar posibles riesgos.
Ante esta situación, el oficial de salud del condado de Los Ángeles emitió una orden de emergencia de salud pública que prohíbe a los residentes retirar escombros de propiedades dañadas por el fuego en áreas críticas hasta que una agencia gubernamental aprobada realice una inspección de materiales peligrosos.
El incendio Hughes sigue representando un desafío para los bomberos, aunque los equipos han logrado avances en su contención, según informó el jefe del Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles, Anthony Marrone, en una conferencia de prensa.
El jefe de Cal Fire, Joe Tyler, advirtió que las condiciones peligrosas persisten y que aún no se ha superado la emergencia. “Los primeros en responder están haciendo un gran trabajo para contener este incendio. Ciertamente, aún no estamos fuera de peligro”, afirmó.
Cabe destacar que el presidente Donald Trump viajará el próximo viernes a comunidades del sur de California afectadas por incendios forestales para evaluar los daños y reunirse con autoridades locales.
Trump ha criticado en varias ocasiones la respuesta de los funcionarios estatales y locales ante la crisis, señalando problemas en la gestión forestal y en las estrategias de contención de los incendios. Su visita incluirá un recorrido por las zonas más afectadas y reuniones con equipos de emergencia y residentes.
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