“No hay plata, no hay alternativa al ajuste, no hay alternativa al shock”. Con estas palabras se refirió el flamante presidente argentino, Javier Milei, a la situación económica del país. El mandatario señaló que será necesario realizar un fuerte ajuste fiscal cuyos beneficios se verán a largo plazo.
En sus primeras palabras al sumir la presidencia, Milei indicó que “hoy comienza una nueva era en Argentina, una era de paz y prosperidad, una era de crecimiento y desarrollo, una era de libertad y progreso”.
Ante miles de seguidores congregados en la plaza frente al Congreso, en Buenos Aires, el ultraliberal nuevo jefe de Estado prometió una nueva era de paz y prosperidad con su gobierno, que recibe lo que consideró como la peor herencia de la historia de Argentina. ”Ningún gobierno ha recibido una herencia peor que la que estamos recibiendo”, resaltó.
JURAMENTO. Milei juró este domingo “por Dios y por la patria, sobre estos santos evangelios”. Posteriormente, recibió la banda y el bastón presidenciales de manos del mandatario saliente, Alberto Fernández, quien le estrechó la mano y dijo unas breves palabras, tras lo cual salió del recinto.
Tras el juramento de Milei como nuevo mandatario, la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel, hizo lo propio, momento en el que Cristina Fernández dejó la Asamblea Legislativa en manos de su sucesora.
Antes del juramento, ambos debieron pasar por el Libro de Visitas Ilustres. Lo llamativo fue que, además de la rúbrica de cada uno, Milei escribió su famoso lema, “Viva la libertad, carajo”, y Villarruel agregó: “Todo por Argentina”. En la actividad estuvieron presentes mandatarios de diversos países.