El mundo se está acostumbrando a los momentos históricos y este viernes Donald Trump ha recibido a pie de pista al presidente ruso, Vladimir Putin, a la llegada de este a Alaska, donde ambos se ven para tratar el futuro de la invasión de Ucrania.
Se trata de su primera reunión desde la vuelta de Trump a la Casa Blanca, y no se ven cara a cara desde el año 2018. Aunque los líderes estaba previsto que se vieran a solas, no ha sido así, según ha confirmado el Gobierno estadounidense.
Están junto a sus asesores finalmente, en un cónclave que ha comenzado alrededor de las 21:30 horas (hora española). A Trump, por ejemplo, le acompañarán el secretario de Estado Marco Rubio y el enviado especial Steve Witkoff.
Trump ha llegado a la pista segundos antes que Putin y ha repetido varios aplausos mientras el líder ruso se acercaba sobre una alfombra roja, después se han estrechado la mano y han charlado durante unos instantes antes de posar ante unas letras conmemorativas y compartir coche de camino a la reunión.
El apretón de manos ha sido largo, con gestos por parte de los dos y un rictus relajado bajo un día nublado en Alaska. Los aviones aterrizaron prácticamente a la vez y esperaron para bajar mientras se ultimaban los detalles de ese inicio de una jornada histórica.