El palacete de Lancaster House, en Londres fue sede de una nueva cumbre europea este domingo 2 de marzo, donde varios países del viejo continente se unieron en apoyo a Ucrania. Así, Francia, Reino Unido y otros países europeos presentarán a Estados Unidos (y por ende a Vladimir Putin) un plan de paz, tal como confirmó el primer ministro británico -y anfitrión- Keir Starmer.
“Es un gigante dormido que ha despertado”, esa definición la dio el primer ministro polaco, Donald Tusk para ‘abrazar’ a Volodimir Zelenski, presente en la reunión, tras la humillación de Trump le hizo en la Casa Blanca.
Eso sí, los mandatarios europeos reconocen que tener a Washington en ese marco “es imprescindible” para que el alto el fuego (y la posterior paz) sea firme y duradero.
En paralelo, confirman dar ayuda financiera a Ucrania para que compre más de 5000 misiles de defensa aérea pues necesita ganar peso.
El gran protagonista de la reunión fue, evidentemente, Volodimir Zelenski, que ‘presidió’ la mesa de la cumbre junto al primer ministro británico -y anfitrión de la cumbre- Keir Starmer Starmer y el presidente francés, Emmanuel Macron: “Nadie más que Putin quiere que siga la guerra, que se vuelva rápidamente a la guerra”, advirtió.
La voz principal hasta ahora en Europa había sido Macron y el presidente francés ha puesto sobre la mesa el debate sobre el paraguas nuclear europeo, un asunto que considera crucial para la construcción de una arquitectura de defensa europea porque, avisó, “nuestra seguridad está en juego”. El planeta vive un inicio de semana tenso de temor por el anuncio de una nueva guerra mundial.
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