Te imaginas llegar a recoger a tu hija al colegio y enterarte que capturaron a un hombre, vestido de escolar en los servicios higiénicos, pues eso fue lo que sucedió en Huancayo.
El detenido usaba el uniforme de la I.E. Rosa de América, colegio de mujeres, incluso tenía trenzas postizas. La información se volvió viral en redes sociales y por supuesto causó la indignación de los padres de familia.
A eso se suma lo que ha vivido en Arequipa esta semana, una estudiante del Colegio Arequipa, quien fue objeto de agresión sexual por un sujeto a bordo de un vehículo de transporte público.
La estudiante de tercer año sufrió tocamientos indebidos por parte del sujeto de 32 años en una couster que hace servicio a Cayma. Esto fue advertido por una trabajadora social quien increpó junto a los demás pasajeros al sujeto, siendo entregado a la Policía, no sin antes recibir su merecido.
No voy a alentar la violencia, porque esta genera más violencia, pero me pongo en los zapatos de los padres de familia y es entendible que reaccionen utilizando sus manos.
Tenemos que cuidar de nuestros hijos y no decir: Eso siempre pasa en el transporte, ¿Acaso tú fuiste parte de los agresores?. estoy seguro que no, entonces dejemos de normalizar ello y actuemos denunciando a esos sujetos en el transporte, el trabajo, el colegio; hablando con nuestros hijos y hacerles saber que ello está mal.
Vivimos en una sociedad enferma, donde los valores se han perdido y el sentido humano ha sido reemplazado por lo mercantil, lo monetario. Sin embargo nuestra casa debe ser una burbuja donde nuestros hijos se sientan seguros, respaldados.
Al igual que la mayoría de personas, llegas a casa cansado y con ganas de ver televisión o escuchar música, hacer deporte, realizar actividades que te relajen; tal vez al igual que muchas otras personas tienes un sin fin de problemas, pero nada puede ser más importante que nuestros hijos, sentarse a comer con ellos y conversar por un momento y hacerlos sentir importantes para nosotros y si así lo haces, felicitaciones porque te estas ganando la confianza de los tuyos, y si no, no pierdas el tiempo y hazlo.
Protejamos a nuestros niños de tantos peligros que ocurren hoy en día. No digo que los sobreprotejas o los engrías en demasía, todo exceso es malo. Pero actúa ahora para que no te lamentes luego, porque el peligro puede estar más cerca de lo que piensas.