Según el Reniec, para las Elecciones Generales 2026, están habilitados para votar 27 392 674 electores; 37 partidos están aptos para presentar candidatos a la Presidencia de la república, al Senado, a la cámara de diputados y al Parlamento Andino. El número global de afiliados de todos los partidos políticos inscritos en el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), son alrededor de 3 139 388 empadronados, prácticamente, el 10% del electorado nacional; relievando, el supermayoritario 90% de ciudadanos, no tienen afiliación política.
Del total de partidos políticos aptos para participar en las elecciones, solo el Partido Aprista Peruano va a elegir a sus candidatos en la modalidad de elecciones internas universales de los 64 466 afiliados; las demás 36 agrupaciones partidarias, lo van a realizar en la modalidad de asamblea de delegados. Supongamos, lo siguiente, por cada uno de los 36 partidos políticos, van a elegir a 100 delegados, los cuales, hacen un total de 3600 delegados, quienes se van a reunir en Lima, para elegir a los postulantes al Poder Ejecutivo y Poder Legislativo.
Significa que, los 27 392 674 electores, el 12 de abril de 2026, elegirán, entre los candidatos escogidos por 3600 delegados, es decir, por un microscópico puñado de ciudadanos (delegados), quienes no representan ni el 0.5% del electorado.
De otro lado, habría que ver, qué porcentaje de afiliados, irán a elegir a los delegados de sus partidos, es probable no asistan ni el 10% de los afiliados empadronados; ejemplificando, de cada 100 afiliados, solo vayan a participar, en las mal llamadas elecciones primarias, diez o menos de diez afiliados. Esta ínfima asistencia de afiliados, en elecciones internas, para la elección de candidatos, ya se observó, para las Elecciones Generales de 2021, y Elecciones Regionales y Municipales de 2022. Nada ha cambiado, ni mejorado, para motivar, la asistencia masiva de afiliados, muy por el contrario, la política se sigue denigrando y la institucionalidad continúa degradándose.
La democracia es el gobierno de las mayorías, en el Perú, es la designación de candidatos, por microminorías.