Ronald E. Torres Flores
El busto y el cuadro con la fotografía del docente arequipeño, Luis Fernando Ponce Rondón, ya se aprecian en las instalaciones del Glorioso Colegio Nacional Independencia Americana, como muestra de gratitud a los años que dedicó a su alma mater desde los primeros días del inicio de su etapa escolar, hasta que concluyó su labor como director de la emblemática institución educativa de Arequipa.
Con la asistencia de los hijos del recordado docente Luis Fernando Ponce Rondón, en las instalaciones de la cita entidad educativa hace unos días se ubicó el referido cuadro y dentro del programa celebratorio del 197 Aniversario de creación del histórico colegio el ultimo 16 del presente y en presencia de autoridades educativas, docentes, alumnos y exalumnos se develo el busto del indicado docente en reconocimiento a su labor desplegada por 42 años laborados en calidad de trabajador y docente.
El exdocente Luis Ponce Arroé, uno de sus hijos al hacer uso de palabra agradeció a la directora del colegio Verónica Irene Paniura Ferrel, por dar las facilidades dadas para la colocación del cuadro y busto del recordado docente Luis Fernando Ponce Rondón, destacando sus virtudes como padre y docente escolar y universitario.
Puntualizó que su vinculación con el glorioso colegio se inició siendo alumno de primaria y luego en el nivel secundario hasta 1921, para volver en el año 1924 hasta 1963 como inspector de disciplina, regente, profesor y director de estudios y desde 1964 al año 1966 desempeñó el cargo de director del colegio Independencia Arequipeña, desempeñando además su labor de docente en la Universidad Nacional de San Agustín.
Su espíritu de educador llegó más allá, fue autor de innumerables textos escolares y universitarios, siendo cofundador de la Facultad de Educación de la UNSA, llegando a integran en Consejo Universitario de la indicada casa superior de estudios. En su vida política se desempeño como alcalde del distrito de Sabandia en el año 1943 y regidor de la Municipalidad Provincial de Arequipa en el año 1945.
Su desprendida dedicación por la educación escolar y universitaria, como la edición de libros, le valió para ser considerado con la distinción más alta del Ministerio de Educación las Palmas Magisteriales que fueron entregadas por el gobierno a través del Ministerio de Educación en el año 1983.
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