Desde la Nación Q’ero Grande, en Cusco, emergen imágenes de una familia devastada por el hambre y el abandono estatal.
Un padre lucha día a día por mantener con vida a sus seis hijos menores, huérfanos de madre tras un parto reciente.
El caso, viralizado en redes sociales, evidencia el profundo abandono que viven las comunidades andinas del Perú. La choza donde habitan deja pasar el inclemente frío de la sierra, mientras la pobreza erosiona sus cuerpos y esperanzas.
El mayor de los niños, de apenas 15 años, confiesa entre lágrimas su impotencia: no puede trabajar porque debe cuidar a sus hermanos. La escena es un reflejo del Perú profundo que muchos eligen no ver.
Mientras la familia clama ayuda por víveres, colchones y abrigo, autoridades parecen más interesadas en su imagen pública.
El canal de Esperanza de Cusco presentó esta historia al mundo a través de sus redes, el camino hacia la choza de esta familia fue largo, al llegar, los menores con lágrimas solo piden tener oportunidades de vivir.
Por ello, el canal habilitó dos números de Yape para donaciones solidarias: 940 865 416 y 974 523 348. La urgencia es hoy, la vida no espera.