La mañana del domingo 4 de mayo fue hallado sin vida Edwin Samuel Apaza Calla (42) al interior de una carceleta de la División de Investigación Criminal (Divincri) de Juliaca.
Según los primeros reportes policiales, el detenido se habría quitado la vida ahorcándose mientras permanecía en custodia.
Al ser descubierto por los policías, fue trasladado de inmediato al Hospital Carlos Monge Medrano, donde el personal médico solo pudo certificar su fallecimiento.
AUDIENCIA. Horas antes -sábado 3 de mayo-, Apaza Calla participó en una audiencia judicial virtual en la que el juez Santos Llanos Quispe, del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de San Román, ordenó nueve meses de prisión preventiva en su contra.
Se le imputaba el presunto asesinato de su tío, Elisban Calla, ocurrido el 26 de abril. Esto luego de que el sospechoso confesará su crimen.
La tragedia conmociona a la comunidad de Chimpa Jarán, en la provincia de San Román, región Puno, tras el asesinato de Elisban Caya, de 58 años.
Inicialmente, Apaza negó su implicación, pero terminó confesando el crimen tras ser interrogado por la Policía.
La investigación señala que, tras causarle la muerte, el acusado enterró el cuerpo, luego lo desenterró y finalmente lo arrojó al río Maravillas.
El investigado debía ser trasladado al penal de La Capilla para cumplir la medida preventiva impuesta. Sin embargo, todo apunta a que tomó la fatal decisión de acabar con su vida antes de su traslado. Las autoridades han iniciado las investigaciones correspondientes para esclarecer las circunstancias exactas de su muerte en custodia.
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