El superintendente nacional de Migraciones, Alberto Balladares Ramírez, participó en la I Reunión del Grupo de Trabajo Consular y Migratorio Perú–Chile, realizada en el complejo fronterizo Santa Rosa, en Tacna, donde se analizó la creciente problemática de migrantes que llegan a la zona limítrofe. “Este espacio es clave para fortalecer la coordinación binacional y enfrentar juntos los retos de la movilidad humana”, señaló Balladares durante la sesión.
El encuentro contó con la presencia de altos representantes de la Cancillería peruana, encabezados por el embajador Pedro Bravo, director general de Comunidades Peruanas en el Exterior y Asuntos Consulares, quien destacó que “la cooperación inmediata es esencial para atender situaciones de vulnerabilidad y garantizar flujos migratorios ordenados”. Por parte de Chile, lideró la delegación la embajadora Marta Bonet Guerricabeitia, directora general de Asuntos Consulares, Inmigración y de Chilenos en el Exterior.
También participaron el director nacional del Servicio Nacional de Migraciones de Chile, Luis Eduardo Thayer Correa, y el jefe zonal de Migraciones Tacna, Luis Ramos, quienes evaluaron de manera conjunta los mecanismos actuales de control y atención. Thayer resaltó que “la frontera es un punto sensible que requiere respuestas coordinadas y efectivas”.
Entre los principales puntos de agenda destacó la necesidad de intercambiar información de manera oportuna entre las autoridades consulares y migratorias de ambos países. Este flujo de datos permitirá identificar con mayor precisión el perfil de los migrantes de terceros países que llegan a la frontera Perú–Chile, facilitando acciones de seguridad, asistencia humanitaria y gestión del tránsito.
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