El 90 % de los totorales del lago Titicaca están secos y algunos pobladores los queman, lo que ocasiona que las aves no puedan anidar abundantemente porque esta flora parece escasa, así lo advirtió el jefe de la Reserva Nacional del Titicaca, Víctor Hugo Apaza Vargas.
Los totorales, hábitat vital para aves como el zampullín del Titicaca y peces nativos como el suche y el karachi, podrían desaparecer gradualmente debido al descenso del nivel del agua.
Según los expertos, la falta de lluvias, atribuida al cambio climático y las quemas indiscriminadas están destruyendo los espacios donde estas especies se alimentan y se refugian.
GUARDAPARQUES EN PRIMERA LÍNEA. Un equipo de ocho guardaparques certificados como bomberos forestales patrulla diariamente las áreas más vulnerables. Su misión no solo es prevenir incendios, sino también proteger a las especies acuáticas y mitigar cualquier afectación a infraestructuras cercanas,como los colegios.
El especialista se espera que con la llegada de las lluvias de los últimos días alivien esta situación para que la fauna y flora se recuperen sin afectaciones graves para el ambiente.
La preservación del lago Titicaca no solo es un compromiso ambiental, sino una responsabilidad social y cultural. Si no se toman acciones inmediatas y contundentes, el impacto podría ser irreversible, comprometiendo no solo la biodiversidad, sino también la vida de las comunidades que dependen de este vital recurso natural. (Con información de radio Onda Azul)