No cesan los ataques contra la propiedad pública. Esta vez, un grupo de desadaptados quemaron los locales de Migraciones, Aduanas, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), la Policía Judicial y el puesto de vigilancia de la Policía Nacional. Los vándalos no pararon hasta quemas las instalaciones este domingo.
Estos ataques se dan en el marco de las protestas que realizan pobladores de Puno contra el gobierno. Los locales servían como puestos de control para la población que viaja entre Bolivia y Puno.
Los efectivos policiales que resguardaban los locales se habían retirado horas antes ante el temor de represalias por los enfrentamientos de los últimos días. Cabe señalar que previamente la comisaría de Ilave también fue quemada como parte de los ataques de grupos de facinerosos.