Tras la polémica que generó el Ministerio de Relaciones Exteriores al solicitar un “certificado de pobreza” a una peruana que será deportada de Estados Unidos con el fin de poder darle ayuda económica a su hija; este hecho generó diferentes cuestionamientos, incluso esta medida fue calificada como fascista y antidemocrática.
Sobre el tema, el excanciller Miguel Ángel Rodríguez Mackay, indicó que nuestras autoridades deben evaluar este tipo de hechos con criterios y no con documentos. Pidió a la presidenta del Perú, Dina Boluarte, a instruir al actual canciller, Elmer Schialer, la eliminación de estos reqauerimientos.
“Ese certificado de pobreza, es un certificado fascista. Lo peor de todo es que se quiera pedir un documento para quien tiene la evidencia incontrastable de que es pobre. Esta situación se debe valorar con criterios, no documentos”, declaró a una emisora nacional.
SE PRONUNCIA. A través de un comunicado, la Cancillería indicó que aquellos que soliciten la subvención de su repatriación deben presentar el “certificado de pobreza”, debido a un decreto vigente. Además, indicaron que están evaluando una modificatoria de esa norma.
Se indicó que este requisito responde a un decreto supremo del 2016, que “obliga” a los interesados a presentar dicho documento, el cual debe ser obtenido en el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social o en cualquier parroquia del último lugar de residencia del interesado.
La Cancillería resaltó que en el marco de las labores de asistencia humanitaria “que llevan a cabo los consulados peruanos en el exterior para atender a connacionales en situaciones de alta vulnerabilidad”, los solicitantes deben presentar una declaración jurada simple en la que expliquen su “situación concreta”.