El fiscal de la nación interino, Tomás Aladino Gálvez, anunció que los equipos especiales del Ministerio Público serán desactivados en las próximas semanas, medida que afectará directamente a las unidades que investigan los casos Lava Jato, EFICCOP y Cuellos blancos del puerto. La continuidad de estos grupos dependerá de una evaluación de la Junta de Fiscales Supremos; sin embargo, Gálvez advirtió que, de no existir consenso, él mismo tomará la decisión final: “Si no lo hace la junta, lo hago yo como fiscal de la Nación”.
Durante una entrevista con Canal N, Gálvez defendió la decisión al afirmar que estas estructuras fueron creadas con carácter temporal y que “ya cumplieron su ciclo”. Sostuvo que la reorganización responde a criterios administrativos orientados a reordenar la operatividad interna del Ministerio Público, descartando que se trate de una intervención motivada por presiones externas o intereses particulares.
El anuncio anticipa una fuerte controversia institucional, especialmente por el impacto que tendrá sobre las investigaciones más sensibles de los últimos años. Gálvez señaló que las críticas provendrán del “sector que protege a Odebrecht”, marcando distancia del trabajo realizado por el equipo especial Lava Jato y reafirmando su postura crítica hacia el manejo de estos casos. Para él, los equipos especiales generan “politización” y han creado “un sistema paralelo” al de las fiscalías especializadas.
Gálvez insistió en que el Ministerio Público cuenta con órganos suficientes para asumir investigaciones complejas sin recurrir a equipos adicionales que funcionan como “compartimentos cerrados”. Recordó que, desde antes de asumir el cargo, expresó su desacuerdo con la existencia de estas unidades y cuestionó la actuación de los fiscales que las lideran, especialmente Rafael Vela y José Domingo Pérez.
Finalmente, el fiscal interino señaló que la disolución de los equipos no implica que los casos quedarán sin responsables. “Los fiscales van a seguir con sus casos, solo que ya no hay equipos especiales”, afirmó. Sin embargo, reiteró sus cuestionamientos a Vela y Pérez, asegurando que, de haber ocupado antes el cargo, los habría retirado “en el acto” por considerar que actuaron en beneficio de Odebrecht, críticas que ha sostenido desde hace años.