La guerra entre el Ministerio Público y Ejecutivo está declarada, luego que la fiscal de la nación, Patricia Benavides Vargas, denunciara constitucionalmente a la presidenta Dina Boluarte y ministros por las muertes en las protestas de diciembre de 2022 y enero, febrero del 2023. Ahora el premier Alberto Otárola, también acusado, pedirá apartar a Benavides de dicho caso.
Otárola Peñaranda afirmó que presentará la solicitud porque Benavides Vargas no tiene objetividad.
“Vamos a presentar un escrito pidiendo que se aparte la señora (Patricia) Benavides de la investigación nuestra porque ha perdido el sentido de la objetividad, que es un requisito indispensable para una investigación coherente. Esa señora ya no nos puede seguir investigando porque puede pasar cualquier barbaridad en la que se pierda la lógica de una investigación que tiene que tener la garantía de la objetividad y la transparencia”, expresó el premier en diálogo con PBO.
El premier lamentó que Benavides Vargas use la memoria de los fallecidos para desviar las investigaciones en su contra. A Otárola Peñaranda se sumó el ministro de Salud, César Vásquez, quien calificó la acusación contra la jefa de Estado como ‘cortina de humo’. Además aseguró que Benavides perdió legitimidad y no debería seguir en el cargo de fiscal de la nación.
La actitud de Benavides frente a la investigación de las muertes en protestas contra el régimen de Boluarte fue criticada por la Asociación de Familiares de Asesinados y Heridos y por la coordinadora Nacional de Derechos Humanos.
Ellos denuncian que Benavides formuló la denuncia por sus propios intereses y faltando el respeto a los deudos. Asimismo, pidieron la renuncia de Benavides.
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