La caída de la torre principal de la iglesia de Lari, en la provincia de Caylloma, refleja la situación que vive esta localidad por los constantes sismos que incrementaron su intensidad la última semana. De acuerdo a informes del Instituto Geofísico del Perú (IGP), hasta 108 movimientos se registraron luego del sismo más fuertes ocurrido el último viernes a las 20:49 horas.
De acuerdo a la evaluación hecha por el IGP, la ocurrencia de sismo se debió a la reactivación reactivación temporal de la falla Colihuire-Huatajcucho, ubicada a 16 km al sur de la localidad de Maca.
Cabe indicar que el sismo más fuerte, de magnitud 5.2 fue percibido con una intensidad máxima de V en las localidades de Maca, Ichupampa, Lari y Coporaque. Ello ocasionó afectaciones en las viviendas de material precario y deslizamientos de tierra en las carreteras de acceso a estas zonas.
ALERTA. Desde el IGP se advirtió que estos sismos continuarán en los próximos días. Ello debido a la reactivación de fallas tectónicas locales, el desarrollo de los procesos eruptivos del volcán Sabancaya y a la ocurrencia de deslizamientos.
Hernando Tavera, presidente ejecutivo del IGP, confirmó esta información. “En Caylloma han ocurrido, están ocurriendo y seguirán sucediendo sismos. El nivel de afectación observado en las localidades de Maca, Lari y otras está vinculado al tipo de construcción de las viviendas, en su gran mayoría de adobe y piedras, así como a la presencia de pendientes que dan lugar a la caída de piedras que obstaculizan las carreteras del valle del Colca”, recalcó.
Ante esta situación, el especialista recomendó a las autoridades de estas localidades firmar convenios con el IGP con la finalidad de realizar estudios de zonificación geofísica para determinar la calidad de lo suelos y el comportamiento de estos lugares ante la ocurrencia de nuevos movimientos sísmicos.