El brutal asesinato de Luis Ángel Fernández Calixto, de 27 años, conmociona al distrito de Chala. Su cuerpo fue hallado en la cocina de su vivienda, con una herida mortal en la nuca y rodeado de un charco de sangre. La alerta la dio un compañero de trabajo, quien acudió al inmueble tras notar su prolongada incomunicación.
Lo inquietante del caso es que no hubo signos de violencia en las entradas, lo que sugiere que el asesino era alguien de confianza. Esta hipótesis cobra fuerza mientras la Policía y la Divincri de Arequipa analizan las pruebas y buscan al responsable del crimen.
La esposa de la víctima, preocupada por la falta de contacto, pidió a amigos que revisaran la vivienda, descubriendo así la escena del crimen. El hallazgo refuerza la urgencia de esclarecer el caso y determinar si se trató de un ajuste de cuentas o un ataque premeditado.
Las autoridades han aislado la zona y el caso ya está en manos del Ministerio Público. Mientras tanto, la comunidad exige justicia y mayor seguridad, temiendo que un asesino aún camine libre por las calles del distrito de Chala.
El caso ha sido derivado a la División de Homicidios de la Divincri Arequipa para una investigación exhaustiva. Las autoridades buscan esclarecer el móvil del asesinato y determinar si existieron amenazas previas contra la víctima, un ingeniero del sector minero.