Desde hace ocho años, el río Tambo presenta una coloración amarillenta inusual pero cada año es más intensa. Un estudio realizado en julio de este año por la Administración Local de Agua (ALA) Tambo - Alto Tambo reveló que el hierro del afluente supera tres veces los estándares de calidad ambiental en la parte alta de la provincia de Islay.
El titular de la ALA Tambo - Alto Tambo, Ángel Zevallos Quezada, precisó que la cantidad del boro en el recurso hídrico podría ser el doble pero esto suele fluctuar. Las otras sustancias químicas que fueron encontradas en cantidades menores son manganeso y arsénico.
Zevallos Quezada aseguró que la principal causa de contaminación del afluente es que la empresa minera Arutani desecha sus relaves al río Coralaque en Moquegua y debido a la corriente del agua llegan al río Tambo.
Además, señaló que la entidad emitió dos procesos sancionadores con resolución hacia esta compañía minera que continúa en etapa de cierre. Tras una semana de alerta, el río Tambo ya no tiene color amarillento y el agua puede volver a ser potabilizada por Sedapar.
ALTERNATIVA DE SOLUCIÓN. El ingeniero Zevallos Quezada manifestó que una alternativa de solución para mitigar los efectos de la contaminación del río Tambo en la población son los pozos subterráneos que proporcionan agua potable.
La ALA Tambo - Alto Tambo entregó a la Municipalidad Distrital de Cocachacra dos acreditaciones de pozos subterráneos en los canales de riego de Ensenada y en el sector del Callejón del Pueblo. Actualmente está en proceso este documento para el manantial Estrella.
Cabe destacar que durante la declaratoria de emergencia, la entidad realizó tres monitoreos al río Tambo, cuando se suelen ejecutar solo dos veces al año. Además que están a la espera de los resultados de las últimas tomas de muestra del recurso hídrico que se llevaron a cabo el 29, 30 y 31 agosto pasados.