Arequipa. “Mis hijos tienen pesadillas y lloran porque vieron cómo su mamá fue arrastrada por el huaico”, cuenta Andrés Pari Visa, padre de cuatro niños que quedaron huérfanos tras perder a su progenitora en el desastre ocurrido en Secocha, provincia de Camaná. La desgracia no solo enlutó a familias y dejó sin vivienda a más de 2000 personas, sino que también dañó la salud mental de las personas.
Ante esto, la Asociación U-Manos (Unique Hand From the World) llevará ayuda psicológica a la zona afectada, el objetivo es atender aquellas personas vulnerables que hasta el momento sufren por todo lo que les quitó el huaico.
La presidenta de la asociación, Fiorella Mattos, informó que todos están concentrados en la ayuda con alimentos y agua, dejando de lado la salud mental de los damnificados.
“Es importante que también se preocupen por el estado de las personas. Niños, jóvenes y adultos perdieron a sus familiares. Ellos tuvieron que ver escenas desgarradoras de cómo el huaico se llevó lo que tanto les costó construir”, sostuvo Mattos.
El 25 de febrero, 10 profesionales llevará la asociación U-manos a Secocha, en coordinación con la Municipalidad Provincial de Arequipa. Mattos pide apoyo al Gobierno para que prioricen la salud mental de los afectados.