Una raya más al tigre en la desastrosa gestión administrativa del alcalde de la Municipalidad Distrital de Socabaya, Roberto Muñoz Pinto. La última actualización del portal Transparencia Económica del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), ubica a dicha comuna entre las cuatro peores en ejecución presupuestal dentro de la provincia de Arequipa.
A casi un mes de cerrar el año fiscal 2023, la municipalidad ejecutó el 41.1 % de su Presupuesto Institucional Modificado (PIM), es decir, solo gastó S/45 millones de los S/109.5 millones recibidos a inicios de año. Actualmente es la entidad pública de zona urbana que presenta el mayor perjuicio, ya que sus otros competidores son pequeños municipios de zonas alejadas como: Vítor (16.9 %), San Juan de Tarucani (23.8 %) y Quequeña (34.1); quienes tienen hasta 60 veces menos partidas recibidas a diferencia de Socabaya.
A esta problemática se suma la ejecución de la subcategoría de gasto en “adquisición de activos no financieros”, dinero para proyectos y estudios de inversión pública. Aquí la comuna de Roberto Muñoz presenta un irrisorio devengado del 36 %.
A pesar de estos malos resultados, en la última semana el burgomaestre alegó tener avances del 95 %, clara evidencia del desconocimiento en el manejo presupuestal del sector público.
Vergüenza interna. Para la regidora de oposición del municipio de Socabaya, Magaly Agramonte Gutiérrez, esta crítica cifra es la evidencia de una gestión sin profesionales técnicos capacitados en el manejo del acto público. Detalló que estos datos del MEF generan preocupación, ya que los únicos afectados son la población, quienes confiaron en esta nueva gestión y a la fecha no hay resultados.
“Es más crítico, si no se hubieran registrado o certificados los casi S/18 millones de presupuesto para la base de serenazgo, solo se tendría un avance del 21.1 %, ahí seríamos los peores. No se vio este primer año un reflejo de cambio”, indicó.
Cuestionó lo declarado por Muñoz al indicar un avance del 95 % cuando la realidad es diferente. Detalló que el burgomaestre piensa que con certificar presupuesto es lo mismo que ejecutar el devengado y girado del mismo.
“Si hay un milagro, ese 36 % en ejecución de obra, podríamos llegar al 42 %, si operan los 10 proyectos en cartera que alegó tener el alcalde”, sostuvo.