Un equipo de arqueólogos descubrió una antigua ciudad en la selva amazónica, que estaba organizada por una compleja red de caminos y canales. Según el profesor del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia, Stephen Rostain, el hallazgo confirma que existió una civilización urbana avanzada que se mantuvo oculta por la espesa vegetación de la zona durante siglos.
Ubicada en la zona de Upano, en Ecuador y cerca de la frontera de Perú, esta ciudad antigua nos muestra una imagen diferente a lo que se creía de las civilizaciones amazónicas, de que solo fueron nómadas o se constituían en pequeñas aldeas dispersas.
El descubrimiento de esta antigua ciudad fue posible gracias al uso de la tecnología LiDAR, que permitió a los investigadores mapear más de 300 kilómetros cuadrados de la selva amazónica e identificar las estructuras subterráneas.
Los arqueólogos identificaron alrededor de 6,000 plataformas rectangulares, algunas de hasta 140 metros de largo, que formaban una red de áreas residenciales y ceremoniales. Estas plataformas fueron construidas sobre colinas y presentaban un nivel de sofisticación arquitectónica inesperada para la región amazónica.
"Este descubrimiento ha demostrado que existía un equivalente de Roma en la Amazonia", afirmó Rostain. "Las personas que vivían en estas sociedades no eran seminómadas perdidos en la selva buscando alimento. No eran las pequeñas tribus de la Amazonia que conocemos hoy. Eran personas altamente especializadas: excavadores, ingenieros, agricultores, pescadores, sacerdotes, jefes o reyes. Era una sociedad estratificada, una sociedad especializada, así que sin duda hay algo de Roma", explicó.
Las estructuras de la ciudad muestran pistas de cómo era la vida en los pueblos amazónicos desde hace miles de años. Los arqueólogos sugieren que los residentes de esta ciudad practicaban una agricultura avanzada, cultivando maíz y batata, y producían bebidas fermentadas. Las excavaciones también han descubierto fosos, viviendas y herramientas como piedras para moler semillas, lo que señala una organización social más compleja y diversa de lo que se creía.
Además, las excavaciones revelaron fosos defensivos, viviendas y herramientas, entre ellas piedras para moler semillas. Las sociedades amazónicas habitaban en estructuras organizadas en torno a plazas centrales y plataformas que servían tanto para viviendas como para ceremonias religiosas. La ciudad fue construida hace unos 2500 años y, según los arqueólogos, la gente vivió allí hasta hace unos 1000 años.