Escribe: María Coaguila Torres
Las empresas Samsung y Micron Technology se unen al creciente grupo de fabricantes de semiconductores que se anunciaron aumentos significativos en los precios de sus productos. Este movimiento responde a la creciente demanda y al desequilibrio entre oferta y demanda en el mercado de unidades SSD y memorias DRAM.
Según informes de la consultora taiwanesa TrendForce, Samsung tiene previsto incrementar los precios de sus unidades SSD para empresas entre un 20 % y un 25 % durante el segundo trimestre de 2024. Inicialmente, la compañía surcoreana había proyectado un aumento del 15 %, pero el crecimiento de la demanda superó sus previsiones.
Con una cuota de mercado cercana al 50 % en el segmento de unidades SSD para empresas, Samsung se encuentra en una posición privilegiada que le permite ajustar los precios con relativa libertad. La demanda en este sector está siendo impulsada principalmente por la expansión de los centros de datos para aplicaciones de inteligencia artificial, que requieren unidades de almacenamiento de alto rendimiento.
Por su parte, Micron Technology también planea incrementar el coste de sus memorias DRAM en un 20% durante el segundo trimestre de 2024. Esta decisión se debe, en parte, a los daños sufridos en sus líneas de producción en Taiwán tras el reciente terremoto, lo que afectará la disponibilidad de sus chips de memoria más avanzados.
Western Digital, otra de las grandes compañías del sector, ha confirmado que también ajustará al alza los precios de sus unidades SSD y discos duros, aunque aún no ha especificado el porcentaje de incremento. La compañía señaló que la demanda de sus productos superó las expectativas, justificando así su decisión de aumentar los precios.
Estas subidas de precios se suman a las estimaciones de TrendForce, que anticipa un aumento del 10% al 15% en el precio medio de las unidades SSD para consumo durante el segundo trimestre de 2024. Además, las unidades eMMC UFS podrían costar hasta un 15% más, y las obleas de chips 3D NAND hasta un 10%.
En este contexto, el mercado de chips de memoria y unidades de almacenamiento enfrenta tiempos complicados para los consumidores y las empresas, que deberán adaptarse a estos nuevos precios y condiciones de mercado.
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